Beber del silencio



Bebo del silencio que, a cuentagotas, me dejó tu ausencia.

Una lágrima.

Te perdí en esos besos que nunca nos dimos.

Te fuiste.

Bailo una triste danza con las palabras que se quedaron en los labios.

Te extraño.

Mi corazón se cegó en la inminente oscuridad desde el día que se apagó tu luz.

Tu fuego.

Sin un adiós, sin aviso, así terminó la historia que un día empezamos a escribir con tanto amor.

El deseo.

Juego con los recuerdos de lo que fuimos, que rebotan en mi memoria hasta desvanecerse en el infinito.

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