El Diario de una Fulana

Este año ha sido duro para mi familia, decidimos poner toda nuestra confianza en Dios, quien es el único con poder para sacarnos adelante en las tormentas. La fortaleza vino de EL, y avanzamos, aunque temerosos, entre tanta nube negra. Nos ocupamos en la oración y lo que había que hacer, conforme pasaron los meses se aclaraba el panorama y cada día se acercaba el final de esta pesadilla. Hoy puedo decir que Dios nos hizo el milagro, nosotros le entregamos nuestra batalla y EL nos regreso la VICTORIA. Estamos agradecido eternamente por su Misericordia. Pero, en nuestra condición de humanos, se que el alma está agotada, las emociones revueltas y a veces el llanto aparece sin aparente razón. Todo ha cambiado, estamos en otro nivel, se siente bien, sin embargo, somos débiles y sentimos miedo y tenemos pesadillas. Es como la resaca emocional de meses de angustia y dolor.  En aquellos momentos de duda, miedo y desesperación buscaba incesantemente respuestas, y llegó a mi, en el mo

Juntos somos más, hay más espacio, más aire que respirar. Juntos puedo escalar la montaña más inclinada Juntos tengo las fuerzas para combatir al más fuerte de todos Juntos, ya no tengo miedo Juntos podemos más Juntos ganamos la guerra Juntos vencimos al monstruo de dos cabezas, colosal Juntos aumenta mi Fe Juntos, Dios nos juntó Junto Dios nos bendijo Juntos, ahora no hay vuelta atrás Juntos, así es como siempre quiero estar Juntos hicimos una familia poderosa Juntos somos indetenibles Juntos, ayer, hoy, mañana y siempre Juntos estamos en esto y seguiremos Juntos conocimos a Dios y nos enamoramos Juntos hemos pasado al otro nivel Juntos hemos vencido Juntos bailamos bajo la lluvia  Juntos danzamos y corrimos bajo la tormenta  Juntos rezamos pidiendo ayuda de Dios Juntos permanecimos durante el derrumbe de los sueños Juntos vimos pasar nuestras vidas justo frente a nosotros Juntos nos vimos cara a cara con la Indeseable dela gente y n

Me gustan los días así, cuando me levanto temprano, y empiezo a hacer cosas en la casa. Cosas que me gustan, porque dejan una sensación de bienestar y finalidad. Me gustan los días así, cuando me levanto y tengo un objetivo, un propósito que cumplir. Me gustan esos días en los que me siento optimista, encaminada a algo, aunque no sea grande, o una gran meta, me gusta el sentimiento de realización. Me gustan esos días en los que no me persigue el fantasma de la apatía, esos días en los que logro salir de mi rutina patética y camino. Camino, miro, respiro, cocino, limpio. Esos días, que no se sí son culpa de las hormonas, no se sí son por el cambio climático, no se sí son por la brisa, la sequía, no se sí son mi años, pero son, llegan. Esos días son mi calma, después de la tormenta, son mi sol después de las lunas que arropan noches largas y crudas. Me gustan los días donde sonrío de alegría y paz, me gustan los días en los que respiro tranquilidad, y transp