Y de pronto, ya no

Y así de la nada, después de tantos años recibiendo tus mensajes, llamadas y correos, de pronto ya no más... Y borre tu número de mi agenda, no porque quiera olvidarlo, si no porque sé que aunque te llame o te escriba no me puedes responder. Y extraño eso tanto que no lo puedo decir , me duele aceptarlo, aceptar que ya no estas y no puedo hablarte y menos escucharte. Me gustaba tanto hablar contigo, disfrutaba tus chistes, siempre me hacías reír, me escuchabas, me entendías y me querías ayudar. Ahora esos momentos y esas cosas de la vida que me hacían feliz, ya no las tengo, ya no te tengo... Estoy sin ti aquí... Me siento sola y desnuda el alma... Y a la vez tan encerrada en mi... Tal vez lo que intento decir es que me haces mucha falta... Y extraño hablar contigo... Que me cantes, tus chistes, tus cuentos largos a los que yo fingía no escuchar, pero me los sé todos.